Sublime

Sublime es levantarse cuando uno quiere...

Sublime es pedir perdón cuando uno hiere...

Sublime es saber lo que se prefiere.

Las palabras se las lleva el viento,

pero se quedan, muchas veces, 

ancladas en el pensamiento.

Sublime es ayudar al que no puede...

Sublime es esperar, aunque se quede...

Sublime es reconocer cuando uno cede.

El tiempo es oro,

y lo puedes respirar 

hasta por los poros.

Sublime es animar al que se detiene...

Sublime es acelerar para que no se frene...

Sublime es retener al amor cuando viene.

No hay mal que cien años dure,

ni herida que sangre,

después de que se la cure.

Sublime es acabar lo que se empiece...

Sublime es educar cuando se crece...

Sublime es elogiar al que se lo merece...

Sublime será tocar las nubes,

en la rutina del corazón,

cuando esté fluye.

Vidda rrobada