¡OH, DIOS DINERO!
¡OH, DIOS DINERO!
¡Dios del
firmamento financiero!
que controlas el
inframundo.
¡OH, DIOS DINERO!
Capitalizaste lo
más profundo
de tus fieles que,
profesando,
de tus fieles que,
procesionando,
se dirigirán a tus rituales
de consumo.
Y el Dios Dinero dejó sus mandamientos…
Mandamientos, donde
el primero, fue el sumo:
Me amarás,
codiciando, por encima de todo,
sobre todo,
las riquezas de la
naturaleza y los desposeídos del mundo.
Su segundo
mandamiento fue rotundo:
Matarás por
conseguir poder
y robarás a cada
quién
lo conseguido en el
trabajo de su fruto.
El tercer
mandamiento siguió el rumbo:
Te aprovecharás del
prójimo,
hasta que éste,
destruido,
solo sea esclavo
tuyo.
Cuarto mandamiento…
para reunir al grupo:
Controlarás los
medios de comunicación,
y sin oposición,
tendrás la
información en usufructo.
Y quinto
mandamiento y último:
Acabarás con la
vida en el planeta.
Y lo harás, sin
tibieza,
convirtiendo en
mercancía cada deshumanizado… cada desnaturalizado producto.
¡OH, DIOS DINERO!
¡Dios del
firmamento financiero!
eres la religión dominante
en esencia…
te erigiste por
encima del resto de creencias.
Eres, a la que, tod@s…
y todas ellas, rendirán un glorificado tributo.
¡OH, DIOS DINERO!
¡OH, DIOS SUPREMO!
¡OH, DIOS INMUNDO!
Comentarios
Publicar un comentario
Deja tu comentario